Uno de cada cinco españoles, mayoritariamente mujeres, sufre estreñimiento. Sus consecuencias son incómodas y molestas: distensión abdominal, formación de gases, sensación de pesadez, de evacuación incompleta...
Para abordarlo hay que cambiar nuestros hábitos higiénicos y dietéticos:
Come bien
Una alimentación rica en fibra ayuda a acelerar el tránsito. Incluye dos o tres piezas de fruta, dos raciones de verdura, legumbres y cereales integrales.
Haz ejercicio
El sedentarismo es un gran aliado del estreñimiento. El ejercicio regular facilita los movimientos peristálticos del intestino.
Educa al intestino
Escucha a tu cuerpo y no reprimas las ganas de ir al baño. Intenta que tu cuerpo se acostumbre a evacuar a la misma hora y, si no es así, dedica un rato a intentarlo.
Si los cambios en la dieta y los hábitos no son suficientes, podemos recurrir a los suplementos naturales:
Sen y Cáscara sagrada
Son dos plantas laxantes de las más utilizadas. Estimulan la motilidad intestinal y aumentan la secreción de agua y electrolitos en el intestino. Se utiliza en el estreñimiento agudo y ocasional.
Malvavisco
Contiene abundantes mucílagos que, al retener agua del intestino, lubrican las heces y facilitan el tránsito intestinal, lo que favorece la evacuación.
Carbonato de magnesio
Atrae agua hacia el intestino ayudando a ablandar las heces. Además, es un antiácido gástrico y aporta magnesio al organismo.